sábado, 10 de enero de 2015

10 Enero 1896 María Guerrero se casa con Fernando Díaz de Mendoza en la iglesia de Santa María


La actriz María Guerrero como "La dama boba". 1906. Sorolla


María Guerrero nació en Madrid el 17 de abril en 1867 en la calle del Caballero de Gracia 23 duplicado. Edificio desaparecido debido a su derribo para la creación de la Gran Vía.


María Guerrero y Fernando Díaz de Mendoza

Su padre, Ramón Guerrero, era ebanista decorador. Provenía de una acomodada familia granadina, pero su abuelo se había alistado en el ejército carlista abandonando a la familia, por lo que hubo que buscar rápidamente un trabajo. Ramón Guerrero se marchó a Francia donde destacó por su habilidad y rapidez trabajando en las casas más importantes de París. Fue protegido de Napoleón III y la emperatriz Eugenia de Montijo.

Regresó a Madrid donde se casó con Casilda Torija, famosa por su belleza. Tuvieron tres hijos, María, Ramón y Ana.

María Guerrero

María fue al colegio de San Luis de los Franceses en la calle de las Tres Cruces. Aprendió a leer antes en francés que en español. Le gustaba tocar el arpa. Era muy aficionada a la lectura y a los estudios. No sólo dominaba ya el francés sino que se puso a estudiar el alemán.

Con el tiempo la familia se trasladó a la calle del Clavel, 21, donde Ramón Guerrero alquiló todo el edificio. En la planta baja instaló su taller y tenía una amplia vivienda. La parte alta la distribuyó en estudios donde se instalaron artistas como Emilio Sala, Antonio Gomar y Gomar o Raimundo de Madrazo o científicos como Luis Simarro.


El Café de Fornos en una fotografía del año 1908

En 1879 Ramón Guerrero restauró junto a Emilio Sala y Antonio Gomar, el café de Fornos, el más lujoso de Madrid. Después llevó a cabo la restauración del café La Iberia en la Carrera de San Jerónimo famoso por haber sido lugar de reunión de los progresistas. Guerrero además surtía a los más importantes teatros de Madrid de muebles y atrezzo. 

Desde su infancia mostró gran afición por el teatro, influida por su padre que la llevaba a ver las representaciones de las principales compañías españolas y extranjeras y consiguió que siguiera unos cursos de arte dramático con la entonces célebre actriz Teodora Lamadrid. 


María Guerrero en Doña María la Brava, 1909

En octubre de 1885 debutó en el “Teatro de la Princesa” de Madrid con la compañía de Emilio Mario en la obra Sin familia, de Miguel Echegaray. Obtuvo una gran acogida por parte del público y pronto comenzó a representar papeles importantes en las obras de los autores más conocidos.


La actriz María Guerrero como "Doña Inés". Raimundo de Madrazo. 1891

Viajó a París para recibir lecciones de Coquelin y llegó a compartir escenario con Sarah Bernhardt. 




A su regreso a España ingresó en la compañía de Mario y Vico, que actuaba en el “Teatro de la Comedia” de Madrid, y luego se quedó de primera actriz en la compañía del primero, con quien estrenó, entre otras obras, Realidad, Sic vos non vobis, de Echegaray, La loca de la casa y La de San Quintín, de Benito Pérez Galdós.


La reina Victoria Eugenia charla con la actriz María Guerrero en el hipódromo del Paseo de la Castellana. Hacia 1920

Llegó a constituir compañía propia en unión de su marido, el actor Fernando Díaz de Mendoza, y gracias al enorme éxito que obtuvo, desde 1897 ambos viajaban anualmente a Argentina, para trabajar en el Teatro Cervantes de Buenos Aires, realizando en 1898 una excursión artística por Francia e Italia, haciendo representaciones en París, Milán, Turín, Génova y Roma.


María Guerrero en plena actuación

Se distinguió en la representación de papeles trágicos, para los que mostraba excepcionales cualidades, pero su repertorio era muy amplio y abarcaba todos los géneros. 


El Teatro Cervantes fue construído en 1921 después de haber sido financiado en su mayoría por María Guerrero y su esposo Fernando Díaz Mendoza

Seguimiento de las obras del Teatro Cervantes

Son famosas sus interpretaciones en María Rosa y Tierra baja, de Angel Guimerá en Don Juan Tenorio, de Zorrilla, La Dolores, de Feliu y Codina, y en los dramas de Benito Pérez Galdós (Realidad, La de San Quintín y La loca de la casa) y de Jacinto Benavente (La Malquerida y La noche del sábado). 


Escena final de Malas herencias, con María Guerrero; fotografía de Manuel Compañy (c. 1903)


En el apartado más anecdótico, impidio el enlace matrimonial de su hijo Luis Fernando con la actriz Carola Fernán Gómez, de quienes había nacido un niño. Este niño, nunca reconocido por María Guerrero, fue el famoso actor Fernando Fernán Gómez. Posteriormente, Luis Fernando contrajo matrimonio con María Guerrero López, sobrina de la actriz.


Placa en calle General Álvarez de Castro 22

Fue asimismo abuela de la actriz Mari Carmen Díaz de Mendoza, hija de Carlos y de la actriz Carmen Larrabeiti.


María Guerrero en el papel de María Rodríguez de Monroy en la obra Doña María la Brava (1909)

Falleció el 23 de Enero de 1928 a consecuencia de un ataque de uremia, tan sólo siete días después de tener que suspender los ensayos del que habría sido su siguiente estreno: Doña Diabla, de Luis Fernández Ardavín, siendo enterrada en el Cementerio de la Almudena de Madrid.


María Guerrero con Emilio Thuillieren Doña Desdenes (1912)

María Guerrero en La flor de la vida(1911), de los Hermanos Álvarez Quintero

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